La atención temprana en entornos naturales
A lo largo del tiempo han surgido diferentes metodologías en relación a la Atención Temprana cuya diferencia se basa en el enfoque y la práctica. El objetivo es ofrecer cada vez la atención más adecuada para cada niño y su familia. Una de estas corrientes, de la que hablaremos hoy en este artículo, es la atención temprana en entornos naturales.
Antes de introducirnos en esta temática tan interesante, hablemos de la Atención Temprana por definición, según se conoce – y comprende- hoy en día. El Libro Blanco de la Atención Temprana la define como “El conjunto de intervenciones, dirigidas a la población infantil de 0 a 6 años, a la familia y al entorno, que tienen por objetivo dar respuesta lo más pronto posible a las necesidades transitorias o permanentes que presentan los niños con trastornos en su desarrollo o que tienen riesgo de padecerlos”. Estas intervenciones, que deben considerar la globalidad del niño, han de ser planificadas por un equipo de profesionales de orientación interdisciplinar o transdisciplinar. El principal objetivo de la Atención Temprana es que los niños que presentan trastornos en su desarrollo o tienen riesgo de padecerlos, reciban, siguiendo un modelo que considere los aspectos bio-psico-sociales, todo aquello que desde la vertiente preventiva y asistencial pueda potenciar su capacidad de desarrollo y de bienestar, posibilitando de la forma más completa su integración en el medio familiar, escolar y social, así como su autonomía personal.
¿En qué se fundamenta la atención temprana en entornos naturales?
La metodología de intervención en entornos naturales está íntimamente relacionada con el modelo centrado en la familia. Esto se debe a que ambas metodologías tienen en cuenta a la familia y su entorno próximo como agentes clave en los procesos de desarrollo y enseñanza-aprendizaje del niño. Por ello, es común encontrar que, en muchos casos, se hace alusión a ambas metodologías de forma conjunta o en el mismo contexto. Este enfoque tiene como principal marcador diferencial el hecho de que la intervención (terapia) se lleva a cabo en el contexto del niño: su hogar en la mayoría de los casos. A diferencia de las prácticas mas habituales que son llevadas a cabo en despachos, salas o gabinetes y en busca de fomentar la generalización de aprendizajes, la confianza y el vínculo con el niño y su familia. Además, esta forma de trabajo, permite identificar y aprovechar eficazmente las diferentes oportunidades de la vida diaria que van surgiendo de forma natural.

¿Qué entendemos por entornos naturales?
Entendemos por entornos naturales los contextos y actividades que son habituales para los niños de la misma edad que no presentan ninguna alteración o retraso en el desarrollo.
Estos entornos naturales incluyen los entornos físicos del menor donde, junto a sus padres o persona de referencia, realicen actividades; los materiales que se encuentran en el entorno físico del menor; las personas que están con él en su día a día y las actividades que se llevan a cabo durante el día, es decir, las rutinas.
Las intervenciones en los entornos naturales tienen como objetivo, conseguir aprendizajes funcionales que mejoren, no solo la calidad de vida del menor, sino también la calidad de vida familiar. Un entorno natural es cualquier lugar donde el menor y su familia viven, aprenden y se desarrollan de forma global.
Cuando se realiza intervenciones en los entornos naturales, hay que tener en cuenta siempre una serie de elementos:
- Los padres, o cuidadores principales, siempre serán el modelo a seguir de los niños; por ello es importante guiar a las familias partiendo de sus preocupaciones, atendiendo a sus singularidades e infundir la confianza en la capacidad de los padres para satisfacer esas necesidades de sus hijos. De esta forma, puede comprobarse cómo supone grandes avances en la mejora de calidad de vida familiar e individual del niño.
- Los entornos naturales ayudan al menor a seguir participando en el aprendizaje de nuevas habilidades, pues promueven el desarrollo de manera más eficaz.
- Las intervenciones en los entornos naturales facilitan conocer las preocupaciones y las prioridades de cada familia y adaptar el proceso de aprendizaje a sus circunstancias y necesidades.
- Todo aprendizaje que se realiza en entornos naturales debe tener sentido para el menor, es decir, el aprendizaje debe estar contextualizado.
Consejos a tener en cuenta a la hora de trabajar en entornos naturales
Los entornos naturales ayudan al niño a modelar su comportamiento y las habilidades de la familia y los compañeros. También hacen que sea más cómodo para su hijo y su familia practicar nuevas habilidades para determinar qué funciona y qué no.
- Antes de comenzar una intervención en entorno natural, es fundamental hablar con la familia y explicarles en que consiste este enfoque. La familia debe entender la importancia de su rol, cual será su papel y sobre todo, que se espera de ellos. Cuando una familia está habituada al modelo de trabajo de despacho donde no toma parte directa, hemos de ayudarles en el proceso de cambio y que sean ellos mismos quienes decidan si quieren o no, trabajar bajo esta nueva dinámica
- Como toda intervención, el trabajo en entornos naturales es una carrera de fondo. No hablamos solamente en relación al desarrollo evolutivo del niño, sino también del contexto y la «adherencia» a la nueva rutina. ¿Qué significa esto? Un niño que ha trabajado siempre en despacho y que identifica su casa como un espacio «libre de obligaciones» tardará más en acostumbrarse a trabajar en casa de forma estructurada. Ojo, tardará más que un niño que ya tiene el hábito, pero la capacidad de adquirir dicho hábito, es la misma a fin de cuentas. La estructuración, la persistencia, los apoyos visuales e introducir objetivos de trabajo poco a poco, serán nuestros principales aliados.
Beneficios de la Atención Temprana en entornos naturales en niños con TEA
A continuación, se exponen algunos de los beneficios que a partir de nuestra experiencia profesional, hemos podido observar a lo largo del tiempo
Integración en las rutinas como parte de los hábitos diarios
Facilidad para generalizar aprendizajes en diferentes entornos
Incremento del desempeño funcional y la autonomía al trabajar a partir de objetos y oportunidades en casa
Fomento de la comunicación y vínculos entre el niño y la familia, el niño y el terapeuta y la familia y el terapeuta
Aumento de la motivación al utilizar objetos, juegos y/o actividades a partir de sus intereses y de lo que utiliza en casa
Naturalización de la intervención. Trabajar en un despacho puede ser un contexto más rígido y «frío», además de que en muchos casos, los niños asocian solamente ese lugar a determinadas acciones y conductas. Aprender forma parte de las oportunidades de la vida diaria.
En el centro Auticmo (Autismo Mérida) somos pioneros en Extremadura y ofrecemos el servicio de atención temprana en entornos naturales en Mérida, Badajoz, Cáceres y Don Benito. Además, para familias que son de otros lugares, disponemos del servicio de supervisión online a familias basándonos en el mismo método a partir de dos opciones: Formación y supervisión a la familia o formación y supervisión a un terapeuta designado por la familia. No dudes en pedirnos más información a través de los medios de contacto disponibles en la web. Puedes acceder a más información sobre nuestros servicios aquí